ihuman de Roberto Ramos-Perea: una tragedia posthumana en clave puertorriqueña.
- Instituto Alejandro Tapia y Rivera
- hace 7 días
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Por Luis Mayo Santana
14 de octubre de 2025.

En el panorama del teatro filosófico contemporáneo, ihuman de Roberto Ramos-Perea se presenta como una tragedia posthumana que interroga los límites de la inteligencia artificial desde una sensibilidad profundamente puertorriqueña.
Esta obra no se limita a explorar los dilemas tecnológicos; se convierte en una meditación escénica sobre la identidad, la memoria y la ética en tiempos dominados por algoritmos. Ramos-Perea propone un duelo entre lo humano y
lo artificial, donde cada línea de diálogo se convierte en una incisión en el tejido moral de nuestra época.
La estructura dramática de ihuman funciona como un dispositivo de confrontación. El conflicto entre Mario Casanova, intelectual caribeño, y Bruno, el androide que lo interpela, se despliega como una tragedia de la conciencia. La arquitectura dialógica recuerda al teatro de ideas, y cada escena se convierte en una batalla ética sin concesiones. El ritmo pausado, casi clínico, permite
que el espectador se sumerja en la lógica implacable de Bruno, mientras la emocionalidad de Mario se desmorona ante la evidencia algorítmica. No hay redención ni catarsis: solo la crudeza de una verdad sin adornos. El tiempo escénico, circular y obsesivo, repite los recuerdos como ecos que nunca se liberan, reforzando la idea de que la memoria humana es imperfecta, mientras la inteligencia artificial la convierte en archivo, en prueba, en sentencia o lo más parecido a nuestra conciencia humana.
Aunque la obra se sitúa en un futuro globalizado, su alma es profundamente puertorriqueña. Mario Casanova encarna al intelectual que lucha no solo por su legado personal, sino por la preservación de una cultura amenazada por la automatización de la historia. Enfrenta el olvido, la pérdida de la oralidad como forma de resistencia, y la colonización simbólica que representa Bruno. El androide no es solo tecnología: es poder, es tribunal, es despojo. En este sentido,
ihuman puede leerse como una alegoría de la colonización digital, donde la memoria colectiva es archivada, juzgada y reescrita por sistemas ajenos a la experiencia vivida. Ramos-Perea convierte el escenario en un espacio de resistencia cultural, donde la puertorriqueñidad se defiende no con armas, sino con palabras, con recuerdos, con matices.
Desde mi humilde opinión, uno de los logros más sutiles de la obra es el uso del lenguaje como frontera ética. Bruno habla con precisión quirúrgica; Mario, con ambigüedad emocional. Esta diferencia revela que el lenguaje humano no es solo comunicación, sino expresión de deseo, arrepentimiento y contradicción. La obra plantea una pregunta inquietante: “¿puede existir justicia sin ambigüedad?” “Bruno juzga con datos, pero Mario vive con matices.” El lenguaje se convierte así en el último bastión de lo humano, en el refugio de lo imperfecto. Ramos-Perea
obliga al espectador a mirar de frente el abismo entre la memoria emocional y la lógica computacional, entre la historia vivida y la historia archivada.
ihuman no es solo una obra sobre inteligencia artificial; es una tragedia sobre el alma en tiempos de algoritmos. En un mundo donde los datos parecen tener más peso que los recuerdos, esta pieza recuerda que la humanidad reside en lo contradictorio, en lo profundamente narrativo.
ihuman me hizo recordar otros productos de creación artísticas tanto del cine como de novela, un diálogo con obras como R.U.R. de Karel Čapek y Marjorie Prime de Jordan Harrison, ihuman se distingue por su introspección ética y su carga cultural. Mientras R.U.R. plantea la rebelión de los robots como amenaza existencial, y Marjorie Prime explora la reconstrucción de la memoria a
través de hologramas, ihuman se enfoca en el juicio moral, en la confrontación entre el archivo y el alma.
En el universo expandido de la ficción sobre inteligencia artificial, ihuman dialoga también con el cine —Her de Spike Jonze y Ex Machina de Alex Garland— y con la literatura, como Klara and the Sun de Kazuo Ishiguro (La novela Klara and the Sun de Kazuo Ishiguro fue publicada el 2 de marzo de 2021.) Mientras Her se centra en el afecto y Ex Machina en la manipulación, ihuman se atreve a juzgar. Al igual que Klara, Bruno observa sin intervenir, pero con una diferencia crucial: Bruno sentencia. En este tribunal escénico sin alma, Ramos-Perea recuerda
que la justicia sin humanidad es solo cálculo, y que el teatro, como espacio de memoria viva, aún puede resistir al algoritmo.
¡BRAVO! Roberto.